La eyaculación precoz, también conocida como eyaculación prematura, se consideró inicialmente un problema psicológico y ha sido durante décadas tratada con terapias cognitivas y conductuales. Posteriormente, han surgido tratamientos farmacológicos, como la prescripción de medicamentos y preparaciones para aplicación tópica.
La eyaculación prematura, en su fase primaria, como en una más avanzada, denominada orgánica o adquirida puede ser tratada. Si la eyaculación prematura, es causada por otra enfermedad, por ejemplo, que no ha sido diagnosticada, como la prostatitis crónica, el tratamiento tendrá efectos positivos. Incluso para el tratamiento de la forma primaria de eyaculación prematura, existen varias opciones que pueden ser prescritas por el médico tratante… En cualquier caso, se recomienda consultar a un médico para un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado.
En segundo lugar, se presentan algunos de los tratamientos más utilizados en hombres con síntomas de la eyaculación prematura. En ellos, se incluyen enfoques cognitivos y de comportamiento (por ejemplo, posiciones especiales durante las relaciones sexuales que logran detener la estimulación), agentes des-sensibilizantes, y también los medicamentos recetados.
La terapia conductual y cognitivo, así como las diversas técnicas psicológicas y físicas están orientados a la formación del hombre en la identificación de los signos de pre-eyaculatorios y así poder mejorar el control sobre la eyaculación:
¿Cuáles son las técnicas para superar la eyaculación precoz?
- Las técnicas de comportamiento más frecuentemente utilizadas son de parada y arranque (start-stop) y la técnica de compresión (squeeze) La experiencia clínica ha demostrado que no proporcionan mejoras a largo plazo. En lugar de la técnica de arranque, que a menudo es insatisfactoria para una pareja, el hombre puede aprender a modular y reducir el nivel de emoción y entusiasmo, mediante el uso de movimientos lentos y sensuales acompañados de una respiración profunda, lenta y pausada (Las técnicas de respiración de control tienen un efecto calmante).
- El objetivo es mantener el nivel de excitación bajo el umbral de la eyaculación, pero manteniendo la erección. Sin embargo, la experiencia clínica, y muchos estudios científicos sugieren que las mejoras conseguidas con estos métodos generalmente no se mantienen a largo plazo.
- La masturbación antes del sexo es una técnica usada por los hombres más jóvenes. Después de la masturbación, el pene se insensibiliza, lo que retrasará un poco más la eyaculación después del período de recuperación. En un enfoque diferente, un hombre aprende a reconocer los signos de aumento de la excitación sexual y a mantener sus niveles de excitación sexual por debajo de la intensidad que da lugar al reflejo eyaculatorio.
Aunque es eficaz en el corto plazo, estas técnicas pueden exacerbar la autoayuda en el manejo de la eyaculación prematura, en lugar de disminuir la patología. Al mismo tiempo, una mala práctica de la masturbación, es decir, una carrera sin parar hasta el clímax puede dificultar aún más el desarrollo de mecanismos de control de la eyaculación.
En general, no existen estudios controlados y certificados que apoyen la eficacia de las técnicas de comportamiento. En cuanto al tratamiento farmacológico, varios tratamientos prescritos para la administración oral se han utilizado con éxito tras el diagnóstico de eyaculación precoz.
Otros métodos, con las cremas y los aerosoles retardantes que tienen efectos muy discutidos. El fenómeno continúa siendo un misterio para la medicina, pero se dan pasos agigantados en su solución.